Informe Gaindegia 2009: Análisis de expertos-- Ana Beraza

La respuesta ofrecida por las
instituciones financieras vascas a la economía real
Ana Beraza

Al inicio de la crisis, las entidades de crédito cuyas sedes están ubicadas en Euskal Herria se encontraban en una situación más favorable que muchas de las entidades financieras del Estado español, tal como mostraban la solvencia, la liquidez y la rentabilidad que figuraban en sus correspondientes balances.

Cabe destacar la respuesta positiva ofrecida por las entidades vascas al problema de la economía real. Las entidades de crédito vascas están participando en los diferentes programas que han puesto en marcha tanto el gobierno central como los autonómicos con el objeto de que los créditos puedan llegar a familias y empresas.

Ana Beraza
Profesora de la UPV

El Gobierno de España, mediante el programa Fondo para la Adquisición de Activos Financieros (FAAF), trató de dotar de liquidez a las entidades de crédito, para que éstas pudieran conceder crédito a familias y empresas. Las entidades financieras vascas, a excepción de BBVA, Banco Guipuzcoano y Bankoa, participaron en dicho programa. El motivo principal para participar en el programa mencionado no era el estar sufriendo problemas de liquidez, sino conseguir financiación a bajo coste. De hecho, el tipo de interés de la financiación obtenida a través del fondo resultaba muy atractivo, y ofrecía la posibilidad de estabilizar el balance. En total, las entidades financieras vascas obtuvieron 648 millones de euros.

Además, las entidades financieras vascas han llevado a cabo diversas emisiones (cédulas hipotecarias, participaciones preferentes, préstamos titulizados, etc.), con el objeto de mejorar su nivel de solvencia y su situación de liquidez. Gracias a todas esas operaciones, junto con los recursos obtenidos mediante las operaciones de pasivo (depósitos a la vista y depósitos a plazo), las entidades arriba mencionadas han reunido la suficiente liquidez para poder continuar ofreciendo créditos.

Por otro lado, todas las entidades financieras vascas han participado en los programas desarrollados por el Gobierno de España, a través del instituto ICO, para la financiación de empresas y familias. También han firmado numerosos convenios de colaboración con diferentes empresas y asociaciones, además de con el Gobierno Vasco y con el Gobierno de Navarra. Por lo tanto, es evidente que las instituciones financieras vascas tienen la intención de mantener su compromiso para con la sociedad vasca.

Dicho compromiso se refleja con mayor detalle en la tabla. Si analizamos los datos publicados por las cajas de ahorros y las cooperativas de crédito vascas hasta septiembre de 2009, podremos verificar que se está reduciendo la tasa de crecimiento de los créditos concedidos a los clientes, pero que aún sigue siendo positiva. En lo referente a la morosidad, en general, se ha incrementado la tasa de crecimiento del índice de morosidad, pero sigue estando por debajo del índice del Estado español. Debido a la estrecha relación que mantienen las entidades vascas con sus clientes, conocen en profundidad la situación de las familias y de las empresas. Gracias a ello, las entidades tratan de encontrar diversas soluciones antes de que surjan los problemas de morosidad, tales como la refinanciación de la deuda, la prórroga del plazo de los préstamos o la carencia de intereses.

Por otro lado, continúa descendiendo la cobertura de la morosidad, a medida que se incrementa la tasa de morosidad, pero el porcentaje es mayor que el estatal.

Las entidades financieras vascas se encuentran en una buena situación de liquidez para poder continuar concediendo créditos en un futuro. Además, ninguna entidad financiera vasca ha precisado de ayudas públicas para el incremento de sus recursos, al no haber sufrido problemas de solvencia; en cambio, Caja Navarra, Caja de Burgos y Caja Canaria han constituido una sociedad para unificar sus actividades, actuando cada una de ellas en su territorio natural, y conjuntamente en el resto del territorio. Mediante dicha operación, pretenden lograr mayor competitividad y eficiencia, a la par que refuerzan su solvencia y liquidez; todo ello sin tener que recurrir al fondo del FROB (fondo de rescate creado por el Gobierno de España con el objeto de impulsar las fusiones y las entidades financieras que se encuentran en una complicada situación). Por otro lado, BBK, tras haber intentado comprar Caja Castilla-La Mancha, se centrará en su negocio en 2010, pero no descarta la opción de llevar a cabo procesos de fusión o compra. Cabe destacar que, en lo que respecta a la solvencia, las cajas vascas se encuentran entre las diez mejores del Estado, y que BBK es la entidad con mayor solvencia de todo el sistema financiero estatal.

En lo que se refiere a la eficiencia, el índice de eficiencia ha mejorados en todos los casos, debido a la reducción de los gastos de explotación. Sin embargo, las entidades financieras vascas han mantenido o aumentado el número de oficinas que tienen en Euskal Herria, a pesar de que hayan cerrado algunas sucursales ubicadas fuera de Euskal Herria.

Los bancos vascos, en cambio, en comparación con las cajas de ahorro y las cooperativas de crédito vascas, muestran tasas de crecimiento de los créditos negativas y mayores ratios de morosidad. Pero, a pesar de ello, se encuentran en una buena situación de solvencia, liquidez y eficiencia.

Por otro lado, los problemas de financiación de la empresas se están reduciendo, gracias a los diferentes planes diseñados por las entidades financieras para hacer frente al problema de la economía real. De cualquier manera, según la encuesta coyuntural realizada por Adegi en septiembre de 2009, aún hoy en día el 38% de las empresas guipuzcoanas de más de diez empleados siguen teniendo problemas, tanto a la hora de obtener financiación, como para la refinanciación de la deuda. Además, según hizo saber la oficina de consumo del Gobierno Vasco, se establecen diferentes condiciones y se emplean diferentes criterios a la hora de conceder créditos de hipoteca —no sólo entre las entidades de crédito, sino también entre sucursales de una misma entidad financiera—. De hecho, la negociación de las condiciones se deja en manos del gerente de cada sucursal.

Además de eso, cuando las entidades financieras recortan el crédito, se intensifica la actividad de las sociedades de garantía recíproca, ya que facilitan a las empresas financiación para realizar inversiones.

Por lo tanto, en la actual situación económica y financiera, cobran una gran importancia los convenios de colaboración firmados entre las sociedades de garantía recíproca y las principales entidades de crédito. De hecho, garantizan a las entidades que les serán devueltos todos los préstamos concedidos a las empresas avaladas por dichas entidades.

En lo que se refiere al volumen de formalización anual, cabe destacar que, de entre las veintidós sociedades de garantía recíproca existentes en el Estado, Oinarri y Elkargi se encuentran entre las diez primeras. Oinarri, precisamente, ha triplicado su nivel de actividad en los primeros nueve meses de 2009, y ha aumentado los avales formalizados en un 195%. Elkargi también prevé que doblará su actividad para el final del año 2009. Ese notable crecimiento se ha debido a las líneas de financiación de las necesidades de circulante que han firmado Elkargi y Oinarri con el Gobierno Vasco.

Para el final de septiembre de 2009, comparado con el mismo periodo del año anterior, la principal actividad avalista de Elkargi se ha reducido en un 6,3% (sin tener en cuenta la influencia de la línea de financiación del circulante).

Ambas entidades han aprobado aproximadamente un 80% del total de solicitudes presentadas a dichas líneas de financiación. Como ejemplo de todo ello, podríamos destacar la actividad llevada a cabo en Nafarroa Garaia por la sociedad de garantía recíproca Sodena, sociedad que desarrolla su función principal en el marco del plan desarrollado por el Gobierno de Navarra para hacer frente a la crisis.

Por otro lado, en lo que se refiere a las entidades de capital riesgo, según la Asociación Española de Entidades de Capital Riesgo (ASCRI), los primeros nueve meses de 2009, y comparado con el mismo periodo del año anterior, han disminuido la inversión y el número de operaciones realizadas por dichas entidades en España, en un 49% y un 13% respectivamente.

En ese contexto, ASCRI ha premiado las mejores operaciones de capital riesgo realizadas durante el 2008, y, entre otras, dos entidades financieras vascas han sido premiadas: las entidades Gestión de Capital Riesgo del País Vasco y Diana Capital, por haber participado en las operaciones de las empresas Biopharma e Indal Taldea, respectivamente.

Por lo tanto, tal y como muestran los datos analizados, las entidades de Euskal Herria, en general, afrontarán el próximo ejercicio con un mayor nivel de solvencia y con una menor tasa de morosidad que muchos de sus competidores estatales. Sin embargo, si en 2010 desaparecieran ciertas políticas de fomento nacionales, estatales y comunitarias, la capacidad de conceder créditos a empresas y familias se podría ver menguada. Por otro lado, los incrementos del IVA y de los tipos de interés oficiales previstos por el Banco Europeo influirán negativamente en las peticiones de créditos.

La falta de liquidez, el escaso crédito y la alta morosidad completan el círculo vicioso, y no será fácil encontrar una solución. La situación no mejorará a menos que la economía se recupere, el desempleo y la morosidad se reduzcan y los empresarios recobren su capacidad de decisión para realizar inversiones.

INDICADORES DE GESTIÓN DE LAS ENTIDADES FINANCIERAS VASCAS, a septiembre de 2009

1. Cajas y cooperativas de crédito vascas

2. Bancos vascos.

En el Pdf junto con el análisis de Ana Beraza se incluye un breve reportaje que nos da una perspectiva sobre el tema.